(Mary Wollstonecraft)
El Coaching tiene una perspectiva distinta cuando trabaja con mujeres porque nuestra manera de interpretar la realidad, sentir y actuar es diferente a la de los hombres por motivos biológicos y socioculturales.
Uno de los grandes retos que tienen las mujeres cada día es tratar de encontrar un equilibrio entre su vida personal y profesional, porque a pesar de los planes de igualdad de oportunidades y de conciliación vida familiar y laboral, los esfuerzos que realizamos las mujeres para estar presentes en todas las esferas de nuestra vida son el doble que el que realizan nuestros compañeros varones.
Para conseguir cambios deben de producirse importantes transformaciones a nivel ideológico y cultural eliminando estereotipos y mitos que todavía siguen presentes en nuestra sociedad. Este “cambio de mentalidad” implica redefinir nuevos roles para hombres y mujeres y elaborar nuevos esquemas de funcionamiento social, algo para lo que todavía muchos hombres no están preparados o no quieren admitir manifestando todo tipo de resistencias.
Es evidente que estos cambios no son posibles si no hay también una evolución en los esquemas ideológicos y en los patrones culturales.
Con este enfoque del Coaching con enfoque de Género pretendo ayudar a trabajadoras, profesionales, empresarias y ejecutivas a descubrir sus potencialidades y fortalezas internas, revisando cuáles son las creencias que están impidiendo llegar a conseguir sus sueños.
